Hola de nuevo. Como explicaba
aquí, me hice
pre-poo y
co-wash. Hoy voy a explicar mis impresiones. El
co-wash lo hice con un acondicionador que tengo, especial para extensiones o para cabellos dañados. Miré la composición (me estoy habituando), para descartar que tuviese muchos alcoholes -que resecan mucho- o siliconas -que bloquean la humectación-. Así que como vi que no tenía mucho ni de lo uno ni de lo otro
, procedí. Extendí el producto igual que haría con el champú: por secciones, masajeando con la yema de los dedos, e intentando no mover mucho el cabello, para evitar la formación de nudos y enredos. Después lo aclaré, y volví a repetir.
Acto seguido, retiré el exceso de agua, me apliqué otro acondicionador, Salerm 21 con proteínas de seda, y cubrí mi cabeza durante una hora con una bolsa de plástico. Pasado ese tiempo, volví a aclararme el cabello y lo desenredé con un peine de púas anchas, bajo la corriente de agua. He leído los inconvenientes de desenredar el cabello cuando está húmedo, porque es cuando se encuentra en su estado más vulnerable, y por lo tanto puede romperse más fácilmente; por lo tanto las recomendaciones que he leído se decantan por dos opciones:
Otra cosa que he aprendido, y que no hacía hasta ahora al desenredar, es empezar desenredando el cabello por las puntas e ir subiendo hasta la raíz. Siempre lo había hecho al revés, y perdía muchísimo pelo. Desde que lo hago al revés estoy notando una diferencia significativa.
Después de desenredar el cabello, me lo
sequé envolviéndolo en una camiseta, como recomienda en este
vídeo Sunshyne, creadora de
Hairlicious Inc., durante una hora. He decidido también dejar de aplicar calor en exceso en mi cabello, por eso ahora no uso secador. Cuando retiré la camiseta que me cubría el cabello, llegó mi primera sorpresa:
¡el cabello estaba suavísimo! Creo que jamás he tenido el pelo tan suave. Aún húmedo, el tacto era suave y sedoso, cuando hasta la fecha siempre lo había notado mucho más áspero.
Tras quitar la camiseta, apliqué mi acondicionador leave-in (de nuevo Salerm 21, ya que tiene diferentes usos); acto seguido apliqué mi humectante, Luster S-Curl no drip, y después sellé con un poco de aceite de almendras para mantener la hidratación. Después me hice unos bantu knots. Otro día hablaré de esto. En fin, la conclusión es que el pre-poo y el co-wash han marcado diferencias en mi cabello:
Seguiré explicando mis progresos con estas dos técnicas a la espera de que mi cabello mejore ostensiblemente.
2 Comments
Al final voy a tener que probar Salerm21 por que me habln maravillas de este leave in, no queria hacerlo por el tema de las siliconas, prefiero evitarlas al maximo… pewro a veces es "imposible"
Scurl… antes me iba genial, fué de mis productos favoritos en 2010, pero las ultimas veces me dejaba el pelo super aspero, poco hidratado y humectado.
Besos
Hola Tris; sí, es cierto que lleva siliconas, pero es lo que tú dices: a veces son difíciles de evitar; yo intento no abusar, pero prescindir totalmente de ellas es un poco difícil.
El Scurl lo usan mis hijas, pero desde que leí que también podía usarlo, pues yo también me lo pongo. Si viera que, con el tiempo, no me va bien, me pasaría al moisturizer casero, con glicerina (tengo una botella de litro y no sabía ni qué uso darle, ¡mira qué bien!)
Besos!